Yo lo que creo es que le va a costar bajar del coche, y es que es para pensaserlo mucho, mientras eres deportista profesional de éxito todo el mundo te adora, sin embargo al pasar a funciones directivas la cosa cambia, no vas a poder agradar a todo el mundo y empezaran a aparecer detractores, en definitiva te puede pasar que la gente te recuerde como el gran deportista que fuíste o como un presidente de la FIA lamentable y controvertido.