ferrol

Para gangsters es el coche ideal. Puedes abrir fuego a través de la luneta-tronera trasera y nunca te van a dar. Bromas aparte, Renault venía haciendo coches para ocupantes de hasta 1,85 m como máximo. Yo lo achacaba a que el «encargao» Carlos Gohsn era bajito y mandón. Dejó una herencia de vehículos donde los más talluditos, acomodados detrás, no sabían dónde meter las rodillas salvo en la riñonada de los ocupantes de «alante» y el peinado se echaba a perder nada más rozar el techo, cosa inevitable. De Meo no es Magic Johnson, pero parece que los Renoles crecen por dentro. Este Mégane aprovecha bien el espacio. Pero no creo que sea mejor que el id3, que es más largo. Saldrá a competir en desventaja.

Dacia tendría que haber electrificado el Kiger en lugar del Kwid. Pero claro, dónde lo hubicamos dentro de la oferta Dacia-Renault? Buscaban algo por debajo del Twingo. Y ahora lo tienen. Volviendo al MCV, o como quiera que se llame, esperemos que ofrezca algo más que un Tricilíndrico de 100 CV, inadmisible a mi entender para un vehículo capaz de albergar a siete sujetos y algunos bultos.

Parece un Triber para Europa. En la foto se le ve rodando por Francia.

Y que ruedecitas, no? Como de juguete.

Al final decide el consumidor, si se doblega a la presión publicitaria y a las modas, es decir, a lo último que la industria propone, o si utiliza su raciocinio y decide optar por soluciones más eficientes de acuerdo a sus necesidades. La culpa no es de ninguna marca en particular sino de todas en general, con la inestimable colaboración de todos nosotros.

Se sabe algo de la capacidad de las diferentes baterías y los tiempo de recarga? Bien el interior, con su estética de vehículo eléctrico, pero mejor que el id3. Lo he visto ya al natural y me gusta mucho por fuera con su ventana tipo Scénic y nada por dentro.

El rey del semáforo.

Volvo a 180 km/h. Los id3 e id4 a VW 160. Ahora Renault también se autolimita a 160, aunque en los modelos pequeños el listón se deja en 130. Los últimos híbridos de Toyota tampoco alcanzan los 180. Sufrimos un ataque de lógica y razón desconocido en la industria automovilística. Los que utilizábamos el coche para superar complejos estamos desprotegidos. La industria nos deja atrás.

Las ayudas electrónicas salvan vidas y disminuyen el número de accidentes y la gravedad de los efectos causados.  De eso no hay duda y debe ser valorado en su justa medida. Pero la dinámica del vehículo y su resistencia estructural son tanto o más importantes. Lo de las dos estrellas del Sandero puede dar la impresión de que las nuevas jornadas de Ingenieros son ya de generación «play». Prima la electrónica, que acaba encareciendo el producto. Pero hay muchos consumidores que no la pueden pagar. En el mundo se viaja a velocidades legales entre 90 y 130, salvó en ciertos tramos de Alemania… cuando se puede. Me pregunto qué estamos haciendo mal.

En eso, si llueve, te mojas.